Los grandes alquimistas como Paracelso alcanzaron el
discernimiento y transcribieron su sabiduría en forma de remedios prácticos, es
decir en elixires especiales obtenidos de metales, gemas y plantas. ¿Pero, a
qué le llamaban energía vital y cómo vivificaba ésta a los hombres y a la
naturaleza?
De acuerdo a la idea de los alquimistas (y a las antiguas enseñanzas ayurvédicas sobre la salud), la energía vital está íntimamente conectada a la "luz de los siete planetas".
Los siete planetas fueron agregados a
los cinco ya conocidos en aquel tiempo: Mercurio, Venus, Marte, Júpiter,
Saturno, el Sol y la Luna (en Ayurveda existen nueve planetas, aquí se incluyen
las dos nodos lunares -planetas- Rahu y Ketu).
Todo sobre la Tierra emerge de
los rayos o energía de estos planetas. Como en un prisma, los planetas dividen
la “luz divina de la creación” en siete cualidades.
Estas crean los cuatro
elementos: tierra, agua, fuego y aire (así como al quinto, el elemento secreto
y sagrado, el éter) y los tres principios alquímicos básicos: Sal, Azufre y
Mercurio (simplificados corresponden al cuerpo, al alma y al espíritu).
Los siete metales en correspondencia con los siete planetas
etas
Los
metales, los minerales, las gemas, las plantas, los animales y también el
hombre se originan a través de varias combinaciones de las siete energías
planetarias, los cuatro elementos y los tres principios básicos.
La “mezcla”
predominante determina lo que emergerá y qué clase de carácter tendrá.
Debido a esto Paracelso enfatiza con respecto a los seres humanos: "Cuando nace un niño, su firmamento nacerá con los siete órganos, los cuales tienen el poder de llegar a ser como los siete planetas y de este modo adquirir todo aquello que corresponde a su firmamento".
En sus exhaustivos escritos
Paracelso se refiere con frecuencia a la gran influencia que los planetas
ejercen sobre el bienestar del hombre, sobre sus órganos físicos tanto como
sobre su naturaleza y su “astrale”, es decir sobre el sistema energético del
ser humano.
Los escritos de Paracelso retratan la complejidad y el impacto de las fuerzas planetarias y demuestran los profundos pensamientos de la alquimia. Pero Paracelso, que fue el fundador de la medicina “moderna” y al mismo tiempo probablemente el alquimista más famoso de la historia, no estaba solo.
Cientos
de años atrás, hasta el siglo XVII, la alquimia era una forma del conocimiento
científico que gozaba de reconocimiento.
Goethe y Newton estudiaron los
principales trabajos de alquimia, extendiéndose desde las obras de Paracelso
hasta la "Aurea Catena" y realizaron naturalmente pequeñas pruebas de
laboratorio.
En los últimos doscientos años se desarrollaron partiendo de la
ciencia universal de la alquimia, disciplinas individuales como la biología, la
medicina, la química, la farmacología, la física, la geología, la astronomía y
la psicología.
Otros campos como la astrología, la geomancia, el conocimiento
energético y la filosofía hermética se asignaron a las “ciencias ocultas”, al
esoterismo o la “Paraciencia” (parapsicología, etc.).
En la alquimia y para
Paracelso todo este conocimiento ya estaba conectado. “Como es arriba es abajo”
es un principio básico de la alquimia hermética de acuerdo al cual se
investigaron los principios de los siete planetas.
Los alquimistas estudiaron
no solamente las influencias planetarias durante la formación y el surgimiento
de las gemas, los metales y las plantas y los aspectos astrológicos al momento
del nacimiento, sino que experimentaron también consigo mismos y sus pacientes,
para ver de qué forma el fluir de esas siete energías vitales era cambiada por
las influencias externas e internas y para ver cómo esta corriente podía ser
ayudada y cultivada.
Esto está comprendido en las enseñanzas alquímicas de los
chakras y de los tres niveles energéticos y cualidades de “Nigredo”, “Albedo” y
“Rubedo”.
El Modelo de los Chakras
En el modelo de chakras alquímico cada uno de los siete planetas
envía a la Tierra tres “cualidades de energía” diferentes que, expresado
simplemente, corresponden a la vibración del cuerpo, del alma y del espíritu de
cada planeta (en la alquimia: sal, azufre y mercurio).
Cada una de las tres
cualidades de los siete planetas puede encontrar resonancia dentro de los
chakras de un ser humano y así se originan los tres niveles diferentes de
vibración del modelo de chakra alquímico.
Nigredo
La vibración de la sal (= cuerpo)
corresponde a los planetas del nivel más bajo de vibración de los chakras, el
así llamado nivel “Nigredo”.
Albedo
La vibración del azufre (= alma) corresponde a los
planetas del nivel de “Albedo” y,
Rubedo
el nivel de vibración más alto, la vibración
del mercurio (= espíritu) corresponde al nivel “Rubedo”.
Los nombres están relacionados con los colores obtenidos durante el Gran Trabajo, es decir la transmutación del plomo de la más baja vibración en oro brillante de la más alta vibración.
En el transcurso de este proceso la materia
se transforma del negro al blanco (y el amarillo) hasta el rojo.
En una persona sana, consciente, las tres cualidades de energía de los siete planetas se encuentran en armonioso equilibrio.
En una persona sana, consciente, las tres cualidades de energía de los siete planetas se encuentran en armonioso equilibrio.
El estado de armonía suprema
corresponde al nivel Rubedo, porque cuando todo fluye armoniosamente en cada
uno y el flujo energético no es obstaculizado ni bloqueado, fluirá entonces la
energía vital más intensamente a través del hombre y él será capaz de
desarrollar completamente sus fuerzas de la consciencia.
Una persona saludable
también necesitará partes de Nigredo, la vibración inferior de
sal-planeta-vibración, porque estas afectan la condensación y la cristalización,
por ejemplo durante la formación de los huesos y las partes sólidas de los
tejidos.
Sin embargo, si esta cualidad de la energía es muy dominante, entonces el hombre “cae” con la totalidad de su ser dentro del nivel vibracional más bajo, el Nigredo –se “petrifica” y “esclerotiza” en cuerpo, espíritu y alma– (en la alquimia se interpreta de hecho como la “caída en el pecado”).
Por otra parte,
si domina el principio disolvente de Albedo, azufre respectivamente, la persona
sufrirá de enfermedades inflamatorias y febriles y se perderá en sus emociones.
Pero la armonía de Rubedo es alcanzada por medio del desarrollo interno y la
introspección.
Solamente a través del proceso de “maduración” interna somos
capaces de manejarnos con las influencias diarias de manera flexible, sin
desviarnos del curso o perder la armonía energética.
Antigua ilustración de los
chakras con los símbolos de los planetas.
Aquí se presenta el nivel más bajo de
vibración de los chakras,
el nivel Nigredo, y por consiguiente la persona
aparece sombreada en negro
Las enseñanzas alquímicas incluyen por lo tanto un modelo de
desarrollo tanto de materiales como del ser humano - desde de la “oscuridad”,
la oscilación baja y lo inconsciente hacia la “luz” y la sabiduría.
Así se entiendieron entonces los tres grados de desarrollo de Nigredo, Albedo y Rubedo como diferentes grados de curación corporal, mental y espiritual, de maduración interna y desarrollo de la consciencia.
Para sustentar este alto
estado de energía y armonía, los alquimistas produjeron los “Arcanos
Superiores”, o grandes remedios alquímicos desarrollados partiendo de metales y
gemas, los cuales se producen nuevamente hoy día de acuerdo con las recetas de
Paracelso.
Chakra | Nigredo |
Albedo I
Sendero del místico |
Albedo II
Sendero del corazón | Rubedo | Día de la Semana | Esencia de Paracelso |
8. Chakra | Rahu | (relacionado con el sábado) | Circonio | |||
7. Chakra Coronario | Saturno | Saturno | Sol | Saturno | Sábado = día de Saturno (como víspera del domingo o “tarde del sol” marca el día sagrado antes del domingo, que es el comienzo de la semana) | Amatista, Vitriolo |
6. Chakra del Entrecejo | Júpiter | Luna | Venus | Venus | Viernes = día de Venus. (alemán Freitag = día de Freya, la diosa germánica del amor, que corresponde a la diosa romana del planeta Venus) | Diamante, Cobre |
5. Chakra Laríngeo | Marte | Jupiter | Marte | Jupiter | Jueves = día de Júpiter; (alemán Donnerstag = día de Donar, correspondencia germánica de Júpiter) | Zafiro, Peltre |
4. Chakra del Corazón | Sol | Mercurio | Mercurio | Mercurio | Miércoles = día original de Mercurio (francés mercredi, alemán Mittwoch = la mitad de la semana), que comienza el domingo, no el lunes. De esta forma su planeta Mercurio también marca el centro de la secuencia de los chakras: el centro mediador del corazón. | Esmeralda, Zinc |
3. Chakra del Plexo Solar | Venus | Marte | Júpiter | Marte | Martes = día de Marte. (Zius es la correspondencia germánica de Marte; francés mardi) | Topacio amarillo, Hierro |
2. Chakra Esplénico/ Sexual | Mercurio | Venus | Luna | Luna | Lunes = día de la Luna | Perla, Plata |
1. Chakra de Base | Luna | Sol | Saturno | Sol | Domingo = día del Sol | Rubí, Oro |
Chakras de los pies | Ketu | (relativo al domingo) | Crisoberilio | |||
Las tres fases de desarrollo: Nigredo, Albedo y Rubedo y la asignación de cada planeta a los chakras. Las esencias de Paracelso están armonizadas en resonancia con el más alto nivel energético de los chakras: el nivel de Rubedo y ayudan a alcanzar y mantener este nivel. Del libro Schätze der Alchemie: Metall-Essenzen, Hans-Nietsch-Verlag, Friburgo (Alemania). |
De donde sacas estas cosas ?... me encanta. ;)
ResponderEliminarPues me encanta a mi que te guste, realmente cuando algo te apasiona no es difìcil buscar, en libros, la web, sabiendo que buscar no resulta muy complicado. Un Abrazo.¡¡Ah y gracias por comentar!! Te lo agradezco muchisimo.
ResponderEliminarCosas que se aprenden día a día, no sabía cuáles eran los siete metales, sigo leyendo buscando información.
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