martes, 13 de marzo de 2012

La Mezquita Catedral de Córdoba


La Catedral de la Asunción de Nuestra Señora, antes de "Santa María Madre de Dios", es el nombre eclesiástico de la Catedral de Córdoba, o Antigua Mezquita de Córdoba. El edificio, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad  junto con el centro histórico de Córdoba.

La Mezquita de Córdoba representa el símbolo cultural y religioso más importante de la ciudad.


Es además el monumento más significativo de Al-Andalus, pues la gran Aljama de Córdoba tiene su origen en el siglo VIII (786) cuando está consolidado ya el emirato independiente, pero alcanza su mayor esplendor en el siglo X con el Califato de Córdoba, manteniendose ya su cuerpo arquitectónico (básico) hasta nuestros días.

La mezquita se compone de tres partes: el Patio de los Naranjos (conserva buena parte de su aspecto original), al que se accede por la Puerta del Perdón, de estilo mudéjar (1377), en donde se observan las hileras de naranjos y palmeras, de las fuentes y los arcos de herradura que lo rodean junto a la puerta se levanta el alminar desmochado parcialmente y rodeado, a principios del siglo XVII, de un «encofrado» de estilo herreriano.

La superficie total del monumento es de más de 22.000 metros cuadrados, con una longitud de 174 metros de largo y 128,4 de largo
El edificio islámico se levantó sobre un solar estratégico al lado del Guadalquivir, que había sido desde tiempos ancestrales el acceso a Córdoba. 

Sobre este solar se asentaban viejas arqueologías romanas y visigodas.
 La propia Mezquita de Córdoba se erige sobre la basílica de San Vicente (situados bajo la sala de oración de Abderramán I, excavados por D. Félix Hernández en los años 30), cuyos restos aún pueden observarse en uno de los ámbitos museísticos de la Mezquita (en el ángulo sur-occidental).


Según una versión sucinta del relato tradicional, la mezquita de Córdoba habría sido iniciada bajo el reinado del primer emir omeya Abderramán I entre el 780 y el 785, sobre la basílica visigótica de San Vicente.

 Abderramán I "El Emigrado" (Abd al-Rahman I al-Dahil) nació en un lugar próximo a Damasco (Siria) en el año 731 y murió en Córdoba en el 788. Era nieto del califa Hisham.

Sufrió sucesivas ampliaciones en los siglos IX y X, y fue concluida bajo mandato de Almanzor.
 La más importante de las ampliaciones es la de Alhakén II a la que pertenecen los arcos del mihrab.
 Fue lugar de reuniones a la vez religiosas y políticas pues podía albergar hasta veinte mil personas.
 El inicio de su construcción se debe al primer emir omeya de Córdoba, haciéndose sobre el emplazamiento de la  basílica visigoda de San Vicente Mártir, iglesia construida en el siglo V, en cuyo solar se inicia la edificación del oratorio o haram en el año 786.

 Ignacio Olagüe Videla en su célebre La Revolución islámica en Occidente (1974), supone por la arqueología que Abderramán I no habría construido nada, y que el templo primitivo ya contaba con el famoso bosque de columnas. 
Como, por su ordenación interior, éste no parece concebido para el culto católico o musulmán, puede que fuera edificado para el culto arriano.
Este primer edificio consta, en cualquier caso, de once naves naves longitudinales orientadas hacia el río  Guadalquivir, cuya anchura es idéntica, a excepción de la central, que conduce al mihrab y las dos de los extremos. 

Arcos polilobulados y entrelazados en la Capilla de Villaviciosa

Los materiales utilizados son de acarreo: fustes de columnas y capiteles procedentes de construcciones y épocas anteriores romanos y visigodos, sobre los cuales se elevan pilares rectangulares de sillería que dotan de más altura al conjunto. 

Para darle estabilidad a este alzado se recurre a dobles arcos, de los cuales el inferior, de herradura, hace funciones de entibo, mientras que el superior, de medio punto, es el que soporta la cubierta.
 Este sistema, además de la alternancia cromática y material de las dovelas, rojas de ladrillo, amarillentas las de caliza, parece estar inspirado en el acueducto romano de Los Milagros de Mérida.
El resultado es un inmenso bosque de columnas coronado de doble arquería que recuerda a un palmeral.

 El conjunto se cierra con el muro de la qibla, que a diferencia del resto de mezquitas no está orientado hacia La Meca sino hacia el sur, hecho éste cuyas causas no se conocen y que ha dado lugar a controversia con hipótesis que van desde la inexperiencia y el error en el cálculo, hasta la pura intencionalidad política tras la proclamación de la independiencia política del emirato corbobés. 

Las obras de esta primera  fase  terminaron en el 788.
Fuente: para las abluciones rituales, obligatorias antes de la azalá. Se sitúa en el patio. 



continuarà...............

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